Dismorfia del dinero: el lado oscuro de tus finanzas que no conocías
Si eres millennial es casi seguro que tengas dismorfia del dinero, pero te juramos que con esto se te quita.
Berenice Villatoro
Estar todo el día pensando en que si ya te compraste ese chicle, pero que si te toca pagar la gas, o que si ya viene la renta, ha hecho que el 41% de los millennials, según un estudio de Qualtrics, tengan dismorfia del dinero, y que no sepan ni cómo salir de eso.
Dismorfia del dinero: el lado oscuro de tus finanzas
Pa’ empezar te urge saber qué cuando hablamos de esto nos referimos a la percepción errónea que tienen un montón de personas sobre su propio dinero, y que no es otra cosa que el miedo a no tener ni para caer muerto. Aunque según este estudio el 49% de los Gen Z también lo tienen, es un trastorno que generalmente tienen las personas en edad laboral, y en el que se sienten constantemente retrasados en temas financieros a comparación de las personas a su alrededor.
Que si la vecina se la pasa en el gym, pero que de viaje, ya te dio algo, pero que si tu hermano se compró un coche nuevo, tú te preguntas cuándo, en fin, nunca te das cuenta de lo que sí tienes.
Enfrenta la dismorfia del dinero
Erin Lowry, una reconocida experta en finanzas y autora de la serie Broke Millenial, nos dio algunos tips para enfrentar esta dismorfia del dinero, pero nos pide que como un primer paso la reconozcas y admitas que la percepción que tienes no está necesariamente basada en hechos.
Lleva un registro de todo
Cero se vale ir por la vida sin saber en qué te gastaste 9,000 pesos en una noche, necesitas llevar un diario en donde coloques tooodo lo que va entrando y saliendo de tu billetera, y sí, hasta esa noche de pasión del fin de semana pasado.
Di no al mundo digital
Estar metidos todo el día en redes sociales no te hará ningún bien, de hecho puedes terminar sufriendo otro tipo de dismorfia, como la corporal, así que por más que te encante ver a tus amigas disfrutando de la playa, por favor salte ya del Instagram.
“No, no soy rico”, esta es la frase con la que debes hablarte antes de meter 10 mil pesos a 90 meses sin intereses, seguido por una pregunta: “¿De verdad la necesito?”, y si la respuesta es no, será mejor que te alejes de las compras.
Metas realistas
Sí, necesitas una casa y sí, necesitas una computadora, un celular, etc, pero no una casa impagable de las Lomas, ni el iPhone más pro, así que lo que compres debe ser algo que no te afecte tanto, que te permita tener ahorros y sobre todo que te ayude en tu trabajo o vida.
Medita sobre quién eres
Otra cosa que es importante que pienses es que en este momento puedes estar pasando por algo no tan cool económicamente, pero pronto te irá fantástico, así que no estés piense y piense en el futuro.
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