Salud mental
Por: Erick Pinedo
Te explicamos cómo usar lenguaje inclusivo de forma clara y sin enredos. Una guía sencilla para hablarle a todas las personas.
No es modita, no es exageración o una cosa de la “generación de cristal”. El lenguaje inclusivo es una forma de comunicarnos que reconoce la existencia de todas las personas, sin borrar ni reducir identidades. ¿Te suena fuerte? Pues más fuerte es ignorar a la mitad del planeta. Aquí te decimos cómo usar lenguaje inclusivo.
Según la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el lenguaje inclusivo busca “visibilizar la participación de las mujeres y de personas con identidades no binarias” en todos los espacios sociales. Así de claro.
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Usar lenguaje inclusivo no significa que tengas que hablar como robot, ni que todo tenga que terminar con “e”. Se trata de ajustar lo que dices para que nadie quede fuera de la conversación. Aquí unos hacks que no fallan:
La Real Academia Española (RAE) no se pone las pilas todavía, pero ONU Mujeres, la UNESCO y muchas universidades ya proponen estrategias concretas para hablarle a todas las personas sin discriminar.
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Porque sí, se puede hablar bonito, claro y con respeto sin parecer Wikipedia.
La neta: la vas a regar. Pero lo importante es reconocerlo, corregirlo y seguir. El lenguaje cambia, como tú. Y si lo que quieres es conectar con más personas desde un lugar chido y empático, vale la pena intentarlo.
Aprender a cómo usar lenguaje inclusivo es empezar a construir una sociedad más pareja desde la raíz: lo que decimos. Porque sí, las palabras también tienen poder y con ellas abrimos (o cerramos) puertas.
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Por: Erick Pinedo