Salud
Por: Erick Pinedo
¿Tu melena no coopera aunque le metas mascarilla y sérum? Checa estos 5 hábitos que dañan el pelo sin que te des cuenta. Evita los errores que maltratan tu pelo y dale reset a tu rutina
¿Te peinas diario pero tu pelo sigue en modo “auxilio? Tranquila, no es solo culpa del shampoo. A veces, sin darnos cuenta, tenemos hábitos que están saboteando nuestra melena. Aquí te contamos 5 hábitos que dañan tu pelo, que haces sin pensarlo y que están dañando tu pelazo más que una decoloración mal hecha.
Si te estás preguntando por qué tu pelo amaneció como si te hubieras peleado con el viento (y perdiste), puede que el enemigo no sea la plancha ni el tinte. Hay varios hábitos que dañan el pelo sin que te enteres, y aquí te los vamos a contar con todas sus letras. No son los típicos de “no uses calor” o “deja el shampoo con sulfatos”. Vamos más allá.
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Suena cómodo: sales de bañarte, te metes a la cama y listo. Pero este hábito inocente es uno de los errores que maltratan el pelo sin piedad. Dormir con la melena mojada favorece el frizz, la debilidad y, peor, las puntas abiertas. ¿Por qué? Porque el pelo húmedo es más frágil y la fricción con la almohada lo destruye a escondidas.
La estilista Katelyn Ellsworth lo explica clarito en Real Simple: al estar mojado, el pelo tiene la cutícula abierta y se rompe más fácilmente. Si no te da la vida para secarlo, usa una funda de satén o hazte una trenza flojita y reza.
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¿Te encanta el baño caliente modo spa? A tu pelo, no tanto. El agua muy caliente abre de más la cutícula capilar, lo reseca y lo deja más vulnerable al frizz y al quiebre. El estilista Álex Sestelo asegura que lavar el pelo con agua caliente es un clásico de los hábitos que dañan el pelo, porque despoja al cuero cabelludo de sus aceites naturales. Bájale al termostato y termina con un chorrito de agua fría para sellar la cutícula. Te va a costar, pero tu pelo lo va a agradecer.
Cepillos, planchas, rizadores… si los usas diario y no los limpias, estás llenando tu melena de residuos, grasa, polvo y quién sabe qué más. Según el estilista Andrew Fitzsimons, usar herramientas sucias es como maquillarte con brochas sin lavar desde 2015: daña, ensucia y entorpece todo lo demás. Limpia tus cepillos una vez a la semana con agua tibia y shampoo suave. Las planchas, con un paño húmedo y apagadas (por obvias razones).
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Te pones bloqueador en la cara, ¿y el cabello? Bien, gracias. La exposición solar sin protección es de esas cosas que dañan tu pelo sin que sepas por qué está opaco o pajoso. La American Academy of Dermatology recomienda usar productos con filtro UV o cubrirte con un sombrero cuando estés mucho tiempo bajo el sol. Si vas a la playa, lleva mascarilla, filtro solar para pelo o, de plano, trenza y sombrero.
No le eches la culpa al shampoo si el problema es la rutina. No se trata de volverte obsesivo, pero sí de hacer ajustes con conciencia. Como todo lo valioso en la vida (tu salud mental, tus finanzas y tu melena), hay que cuidarlos con intención.
Ahora que ya leíste los 5 hábitos que dañan el pelo, lee esto:
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