Adiestra tu mente para sobrevivir a la incertidumbre

Desde la perspectiva de la tradición budista la incertidumbre puede manejarse de dos diferentes maneras.

Compartir

Por: Tony Karam

Cuando hay un reconocimiento de una condición y circunstancia propia a la existencia y sobre la cual el individuo no tiene injerencia. Esta simplemente representa una cualidad de las formas como son. Cuando nosotros nos negamos y nos resistimos a que la naturaleza es algo cambiante, vivimos con ansiedad e insatisfacción. La respuesta a esto es la terapia que el individuo debe cultivar en su afectación de la naturaleza, es decir, mejorar su relación con su entorno y aprender a aceptarlo como algo que constantemente está en transición.

Cuando opera como una herramienta de desarrollo evolutivo para el individuo, porque genera renuncia a la posibilidad de orientar nuestras vidas en una dirección positiva y segura.

La que es en torno a la vida

El hecho de que nosotros nunca sabemos lo que va a suceder, no podemos predecir ni un momento del mañana, no podemos ni predecir lo que va a pasar en un instante, no podemos predecir nada y esto nos genera una dimensión muy grande de ansiedad.

La que es por insatisfacción

Aun las cosas buenas de la vida no duran. Las persecuciones hedónicas y mundanas como son la fama, la alabanza, el placer y las posiciones, son siempre de corto plazo y finalmente nos dejan siempre deseando algo más o insatisfechos. Podemos trabajar para tener una maravillosa vacación en la playa y que al llegar ahí llueva todo el tiempo, o podemos trabajar para tener una buena reputación y la misma puede verse manchada en cualquier instante. 

El camino interno

ChekawaYeshe Dorje, uno de los más grandes contemplativos tibetanos del siglo XIII, en un famoso texto llamado “Adiestramiento mental en siete puntos”, da un ejemplo muy simple y muy directo para eso. Dice, “No seas esclavo de las circunstancias externas”. Y en efecto, el mundo en el que convivimos tiene la capacidad de influenciar nuestra experiencia, pero no tiene la posibilidad de determinarla. La determinación de nuestra experiencia depende de factores internos y esta perspectiva no se centra en intentar controlar el mundo y sus circunstancias, sino en transformar la manera en que el individuo interactúa con esta, siempre de una forma positiva, como decía el filósofo Friedrich Nietzsche, “Lo que no mata fortalece”.

La fe

Cuando uno entiende que la incertidumbre es una parte constitutiva de la realidad y deja de pelear con ella, la abraza y la acepta como natural, disminuye radicalmente el grado de ansiedad que comúnmente experimentamos al tratar de combatir lo que no es compatible. Hay que tener fe en torno al hecho de que no importa lo que acontezca a nuestro alrededor, nosotros siempre contamos con recursos para darle sentido. Se dice que aquello que es negativo es una purificación y aquello que es positivo, un reforzamiento de nuestras cualidades finales.

Hoy en día

Existen varias formas de atravesar los momentos que estamos pasando como humanidad con mayor paz. Primariamente, vivir cada día, hacerlo de momentos, soltar las expectativas de futuro, soltar el miedo al pasado, a lo que ya no es y a lo que todavía no se hace presente, vivir momento a momento y tratar de darle sentido a lo que sea que tú pienses. 

EJERCICIO

Cuando te ataque la incertidumbre repítete a ti mismo tres veces:

“Estoy teniendo un momento difícil, no puedo controlar lo que viene, pero en este momento tengo ______ y eso es suficiente por ahora”.

Al regresarnos al presente podemos apreciar lo que tenemos y calmar la ansiedad que nos provoca el futuro.

¿Te gustó esta nota? Califícala

1 Star2 Stars3 Stars4 Stars5 Stars (2 votes, average: 5.00 out of 5)
Loading...

Sé el primero en comentar este artículo

Dejar una respuesta