Hay conversaciones que son más delicadas que otras, pero olvídate de empezar con un “disculpa, ¿tienes cinco minutitos?” Te decimos cómo lograr que te pelen y tengas éxito
No es fácil hablar de temas importantes con tus hijos, mucho menos cuando eso mismo que te preguntan ellos (¿a dónde te vas cuando mueres?) te lo sigues preguntando tú a tu tan avanzada edad
“¿No me estás oyendo, verdad?”, te reclaman toooodo el tiempo. Para que ya no estés en la baba, debes entrenar tu oído