Clásico que estás esperando a tu crush y de pronto... ¡el gruñido en la pancita te empieza a traicionar!
Si eres de esos que se la pasa con el estrés hasta el cielo, pensando 24/7 que algo va a pasarte y además, con cada problema te da un retortijón que sientes que se te va la vida, entonces es probable que estés somatizando tus emociones. Te vamos a explicar por qué el estrés te puede dar diarrea y cómo escapar del córrele que te alcanzó.
Básicamente “somatizar” es cuando llevas al límite a tu cuerpo con el estrés, los problemas emocionales, la ansiedad o depresión y los conviertes en síntomas que afectan tu cuerpo físicamente. ¡Oséase, te empieza a doler la panza!
De hecho, el estrés es una respuesta natural de tu cuerpo a situaciones que percibe como amenazantes o desafiantes. Cuando te enfrentas a una situación de este calibre, tu cerebro libera hormonas del estrés, como el cortisol, que lo preparan para luchar o salir corriendo y obvio, le da en la torre a tu sistema digestivo.
Pa’ empezar debes saber que existe una conexión entre el intestino y el cerebro que se llama “eje intestino-cerebro“, que conecta el sistema nervioso central con el intestinal, regulando el movimiento de agua y electrolitos.
Y aunque la diarrea no debe durar más de dos días, generalmente esta se va en cuanto empiezas a calmarte, pero si ya superaste el estrés y tu estómago no para, CORRE con un especialista. La diarrea es la forma en que nuestro cuerpo nos indica que algo está mal, así que presta atención a los síntomas.
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Cuando te estresas, tu cuerpo tiene como prioridad utilizar la energía para luchar o huir y acelera la velocidad en la que los alimentos pasan por tu sistema digestivo. Esto puede llevar a una infernal digestión causando diarrea.
El estrés puede causar una mayor irritación en el revestimiento de tus intestinos, lo que además de provocar diarrea, te va a generar otros problemas gastrointestinales.
La ansiedattt y los problemas de salud mental, también pueden alterar la microbiota intestinal, oséase, a las bacterias que viven en tu intestino. Si te sientes muy, pero muy estresado, recuerda tomarte un momento de descanso, leer un libro, ver un Consultorio Moi o de plano buscar a alguien con quien puedas hablar. Sigue estos tips para que el estrés abandone tu cuerpo.
Practicar técnicas de relajación como la meditación, el yoga o simplemente tomarte un tiempo para respirar profundamente, puede ayudar a calmar tu sistema nervioso y tu intestino.
Una alimentación equilibrada y rica en fibra puede ayudar a mantener un sistema digestivo saludable. Evita alimentos irritantes como el café y la grasa si estás expuesto al estrés.
La diarrea puede deshidratarte, así que asegúrate de tomar suficiente agua para mantener tu cuerpo bien hidratado o en dado caso, electrolitos. El estrés y la diarrea a menudo van de la mano debido a la complicada relación entre tu cerebro y tu sistema digestivo. Aprender a manejar el estrés de manera efectiva y lleva un estilo de vida saludable, eso te ayudará a mantener un sistema digestivo feliz.
Ahora que ya sabes por qué el estrés te puede dar diarrea y cómo puedes combatirlo, cuéntanos cómo le haces para evitar caer en problemas.
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