Meter los jitomates al refri hace que pierdan su sabor
Si quieres disfrutar lo mejor de los jitomates, tendrás que comerlos recién cortados de la planta.
¿Estás harto de comer salsas y tortas sin sabor?
¿Los jitomates ya no te saben como antes?
¿Recuerdas con nostalgia el sabor de ese fruto delicioso?
¡Tenemos la solución! ¡Llame ahora! O más bien, comience a sembrar en su casa ahora.
Los rumores que por años nos han dicho y hemos confirmado con cada sándwich y ensalada son efectivamente ciertos. Los jitomates cambian su sabor desde el momento en que son cortados de la planta, y este cambio es más grave si se meten al refrigerador. Ahora sabemos exactamente por qué.
El sabor de los jitomates está dado por los azúcares, ácidos, y compuestos volátiles que tienen. Éstos últimos son derivados de otras moléculas, que a su vez son producidas por la expresión de cientos de genes.
La expresión de esos genes no termina cuando los frutos son cortados de la planta. Los compuestos volátiles siguen siendo sintetizados durante la maduración. Pero hay un problema: que esos genes se expresen, o en otras palabras, que se prendan o se apaguen, depende sobre todo de las condiciones en que madura ese fruto, sobre todo de la temperatura.
En un experimento reciente se vio cómo era afectada la síntesis de volátiles y la relación de esto con varios genes. Las temperaturas frías hacen que se apaguen la mayoría de los genes que producen volátiles. Esto en efectos prácticos quiere decir que si los jitomates se refrigeran a menos de 12°C la calidad de su sabor se reduce drásticamente. Si estos tomates pasan un día entero a más de 20°C, algunos de los genes se vuelven a prender y se recupera algo del sabor, pero ni la mayoría de los genes ni del sabor vuelven a ser lo que fueron.
¿De dónde vienen los jitomates que la mayoría de nosotros compramos? Seguramente de un lugar muy lejano a nuestras bocas. Seguramente de haber viajado cientos de miles de kilómetros y haber pasado por diferentes temperaturas, y con eso haber perdido cientos de distintos sabores. La solución para un sándwich más rico, una ensalada más sabrosa, una salsa más compleja, y un largo etcétera de mejores alimentos, se encuentra en comer jitomates recién cortados de la planta. Hay que intentarlo. No es tan difícil.
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Aprovecharé esta nota para insistir en mi punto de tener nuestro huerto urbano. Como le he dado lata a mi marido con el tema pero hasta el momento sólo he conseguido plantas aromáticas/medicinales.