Así puedes retomar la rutina después de vacaciones

Si sientes que no logras regresar a tu vida “pre-vacaciones” estos tips son para ti

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No hay nada como unas buenas vacaciones y tampoco hay nada que dé más flojera que regresar a la rutina. Es perfectamente normal que el cerebro y cuerpo necesiten un tiempo de adaptación, sin embargo, hay veces que parece imposible regresar al ritmo tan acelerado que llevamos. Y aunque realmente no tenemos de otra más que regresar a trabajar y andar de aquí pa’ allá, hay ciertas acciones y hábitos que podemos reincorporar o sumar a nuestra antigua rutina, para hacer este cambio un poco más amable.

1. El regreso a casa después de las vacaciones: cuando regresas de unas merecidas vacaciones, tu casa habrá estado cerrada por un tiempo, por lo que es normal que la encuentres oscura y fría, eso sin mencionar que te sentirás bajoneado porque acabas de regresar. Así que lo primero es abrir las ventanas para dejar entrar el aire, sacar el polvo y refrescar la casa.

2. Establece tus prioridades: organiza tu rutina diaria con los pendientes más importantes y que creas poder hacer lo antes posible (no tienes que hacerlos todo el primer día). Planifica un periodo de tiempo mínimo para volver a tu rutina, pero sin sentirte abrumado. Y recuerda ser flexible siempre salen cosas inesperadas.

3. Planifica tu tiempo: esta es una de las primeras cosas que debes hacer. Organiza tu horario (la hora a la que te levantas, vas al trabajo, entrenas, comes, te acuestas) y sé lo más estricto posible con este programa (esto será difícil de hacer al 100% los primeros días) porque te ayudará a volver a tu rutina, tareas y actividades diarias más rápido.

4. Vuelve a tus hábitos saludables: si eres de los que dejan el comer sano y el ejercicio en casa, es momento de retomarlos. Lo mejor es hacerlo desde el primer día de tu regreso después de las vacaciones. Volver a tus hábitos saludables es la clave para volver a tu rutina diaria. No olvides tomar en cuenta:

  • Comida: queremos volver a nuestros hábitos saludables mientras disfrutamos del proceso. Y los pasos son claros: toma mucha agua durante el día, llena tus platos de verduras, controla las cantidades, reduce los carbohidratos y lo más importante, organiza un plan de alimentación (horarios y menús).
  • Ejercicio: no tienes que ir al gimnasio y hacer tres horas el primer día, porque estarás destruido al día siguiente. Comienza con una hora de actividad en días alternos y luego puedes comenzar tus actividades con mayor frecuencia.
  • Sueño: La mejor manera de volver a tu rutina de sueño es comenzar a acostarte temprano (una hora antes de lo normal) y luego programar la alarma con anticipación cada mañana hasta que regreses a tu rutina diaria.

5. El regreso al trabajo: si tuviste suerte, pudiste apagar la computadora y olvidarte del trabajo, los correos y las llamadas durante las vacaciones. Cuando regresas, tienes que afrontarlo. Lo primero es no agobiarte, es normal que no puedas sacar todos los pendientes el primer día. A partir de aquí, puedes empezar con estos puntos básicos:

  • Saluda a tus compañeros de trabajo, comparte recuerdos y deja que la gente sepa que has vuelto.
  • Organiza tus emails y llamadas por nivel de urgencia (diferencia urgente con importante)
  • Pon la alarma de tu teléfono cada 45-60 minutos para que te levantes del ordenador, te estires, bebas agua, camines o tomes un respiro.

A partir de este momento, comenzarás a sentir que estás de vuelta en el trabajo y en unas pocas horas, estarás al día con todo el trabajo más urgente.

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