¿Necesitas un detox de redes sociales?

Si no puedes dejar tu celular ni por 10 minutos, te urge un detox de redes sociales. Empieza por sustituir tus apps.

Es notorio ver por todas las calles de la ciudad y en lugares públicos a personas adictas a su celular. En un café, ves a dos amigas “conviviendo” porque cada quien está en su celular. ¡Incluso pueden estar ¡hablando en el mismo grupo de Whatsapp!

También pensamos que se puede hacer dos cosas a la vez, o más. Pero no, la capacidad cerebral disminuye y después no podrás recordar lo realmente importante.

Sin duda alguna, las redes sociales más usadas son Facebook, Whatsapp, Twitter e Instagram y estás pegado todo el día en al menos una de estas. ¿No extrañas las “redes sociales antiguas”?

Si quieres empezar con un detox de redes sociales, empieza por regresar a lo antiguo.

1. Cambia Facebook y haz un chismógrafo. Vas a convivir más con amigos, cara a cara, y lo mejor es que quedará entre ustedes ¡nada de robo de información!

2. Cambia Instagram por una cámara de verdad. No tienes que ser un fotógrafo profesional para agarrar una cámara, hay de muchos tamaños, formas y colores. También, ¡imprímelas! Además no te quedas estancado en las selfies, ¡cámbiale!

3. Deja el Whatsapp ¿poooor? ¡Habla por celular! A más de uno le ha pasado que mensajea notas de voz. Mejor hablen directo por teléfono, o reúnanse para echar el chisme.

4. Twitter, también entra en el detox, cámbialo por el periódico. Lo que haces es ver noticias, lo que está pasando en tu ciudad, país y en el mundo. En cada esquina de la calle puedes encontrar periódicos de todos los temas, desde finanzas y noticias internacionales hasta el chisme del espectáculo.

 

Y si de plano te cuesta mucho trabajo dejar las redes sociales, hay campamentos para la desintoxicación virtual. Eso sí, tienes que viajar a California para asistir a uno. Son ¡72 horas sin wi-fi y sin tableta!

Algunos son reSTART y Camp Grounded tratando a adictos del internet y sus aparatos,  nadie usa teléfono y NADIE dice su verdadero nombre. El éxito de estos campamentos ha sido tanto que ya hay en Nueva York y Carolina del Norte.

Seguro no estás tan mal, con los consejos que te dimos puedes bajarle a la adicción. Esperamos que no sea necesario ir a un campamento, ¿o si?

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