Cómo evitar problemas de salud en vacaciones

Llegaron las vacaciones, y las enfermedades no descansan. Así es cómo se evitan enfermedades en vacaciones, da clic.

Compartir

La época de vacaciones se caracteriza, casi siempre por un cambio grande en nuestra rutina diaria. Hay gente que disfruta de este tiempo levantándose más tarde o durmiendo una siesta quizá. Algunos otros, por el contrario, se levantan más temprano y aprovechan para hacer ejercicio. Lo cierto es que en general hacemos lo que no podemos o no nos damos permiso de hacer en días normales. Para un gran número de mexicanos, vacaciones es sinónimo de relajar (a veces mucho) la disciplina. Y eso no está para nada mal, siempre y cuando tu conducta no te eche a perder el tan ansiado y necesitado descanso.
He aquí los 8 posibles saboteadores de tu anhelado reposo y cómo evitarlos:

1. Deshidratación:
Ni pienses que estoy hablando de que literalmente te seques por completo después de caminar por el desierto. Cuando viajamos, en coche o en avión, no nos preocupamos por beber suficiente agua y sufrimos de diferentes grados de deshidratación. Esto trae como consecuencia un desbalance en nuestro metabolismo en general que nos hace más susceptibles a ciertas enfermedades como infecciones. Por lo tanto, procura beber 100 mililitros de agua (los refrescos no cuentan) por cada hora de viaje. Tu piel (ojo mujeres) y todo tu organismo te lo agradecerá.

2. Infecciones de Vías Respiratorias:
Nuestra garganta y pulmones son muy sensibles a los cambios de temperatura y humedad ambiental. El aire acondicionado en los aviones y en los hoteles es llevado a los extremos casi siempre. Poco es lo que tú puedes hacer en estos casos, salvo protegerte de los cambios bruscos, utilizando sweater ligero por ejemplo y evitando prender el aire acondicionado de tu cuarto por las noches. Si prendes un ventilador de aspas pasarás una noche agradable sin las consecuencias indeseables y frío gélido del aire acondicionado.

3. Insolación:
Pasar demasiado tiempo en el exterior y sin la adecuada protección, principalmente en la playa, te puede llevar a una insolación que te tendrá fuera de combate por lo menos un par de días. Hoy es fácil encontrar ropa con protección solar y bloqueadores que te protegen muy bien de este molesto problema. Procura no pasar mucho tiempo expuesto al sol. Aquí también te recomiendo una hidratación constante y permanente.

4. Infecciones gastrointestinales:
¡Las vacaciones no te transforman en una máquina devoradora que todo lo digiere! Tampoco son sinónimo de “atragántate hasta reventar…total, son vacaciones…” Si bien es muy rico romper la rutina de nuestra dieta, te recomiendo no caer en excesos y sobretodo cuidar el origen, frescura, cantidad, calidad e higiene de lo que consumes. Esto es particularmente importante si vas a cualquier lugar con hábitos y costumbres alimenticias diferentes de las nuestras. Esa creencia de que “los mexicanos comemos de todo sin que nos haga daño” es muy equivocada. No quieres pasar tus días de descanso en el baño con diarrea y vómito.

5. Lesiones osteo-musculares:
No te confundas: estar de vacaciones no te devuelve 20 años de vida ni te convierte mágicamente en la estrella deportiva que crees ser. Así que, si se arma la cascarita en la playa, sé consciente de tu edad y sobretodo recuerda que hace como dos siglos que no mueves un dedo. Diviértete y participa pero por favor no intentes ese gol de “chilena” que estas seguro te inmortalizará frente a tus espectadores. Te lo digo Juan, para que entiendas Gerardo… Tu cuerpo y tu familia te lo agradecerán.

6. Pérdida o falta de energía:
Todo cambio en la rutina tiene una repercusión, pequeña o grande, en tus niveles de energía. Comer sanamente evitando períodos prolongados de ayuno, beber agua regularmente (2-3 litros al día) y darle a tu cuerpo un buen descanso con por lo menos 7 horas de sueño EN LA NOCHE, logrará que tu cuerpo y mente estén en óptimas condiciones y tu nivel de energía sea extraordinario, manifestado por un alto rendimiento físico y mental en TODAS las áreas de tu vida.

7. La terrible y temida mega-cruda:
Nuevamente, recuerda que tus hazañas de adolescente con el alcohol han quedado atrás y tan solo queda… nada de lo que fuiste. Si. Es una realidad tan horripilante como cierta. Recuerda que todo lo que te chupes hoy te pasará la factura mañana (con intereses de usurero). Tu dices…

8. Accidentes:
La época de vacaciones se caracteriza por un incremento enorme en accidentes automovilísticos, es un hecho. Si vas a manejar, a riesgo de sonar como tu abuelo, te suplico que revises tu auto antes de salir a carretera, descansa lo suficiente la noche anterior y por favor, no bebas alcohol. Conduce despacio y con todas las medidas de seguridad. De todas las cosas que pueden pasar está es la que MÁS quieres evitar.

Nada mejor que regresar de unas buenas vacaciones con grandes anécdotas y memorias imborrables, de preferencia que no incluyan hospitales y mucho menos misterio público…

“Las mejores vacaciones son aquellas que dibujan una sonrisa en tu rostro cuando las recuerdas” G.C.

¿Te gustó esta nota? Califícala

1 Star2 Stars3 Stars4 Stars5 Stars (No Ratings Yet)
Loading...

Sé el primero en comentar este artículo

Dejar una respuesta