No por mucho sudar… ¡Vas a adelgazar!

No todo es adelgazar, checa los mitos y verdades del sudor.

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¡Una disculpa de antemano! No por sudar como puerco en cautiverio estás quemando grasa. ¡La mayoría creemos que hay una relación directa entre cuánto sudamos y cuánta grasa estamos perdiendo! Pero no tienen una relación per se. De haberla, la gente que vive en lugares muy cálidos estaría muy fit o cuando vamos a la playa, bajaríamos de peso y…¡pues no!

Sudamos para regular la temperatura corporal (la normal es entre 36.5 y 37.5º). Nuestro cuerpo está diseñado para mantener el equilibrio –homeostasis- todo el tiempo; y el sudor es el responsable del calor.

Cuando haces ejercicio, el cuerpo incrementa su temperatura, lo que hace que quemes más calorías; y acelera el metabolismo. Sin embargo, para que el calor corporal no exceda niveles saludables, el cuerpo comienza a liberar agua lentamente, por medio de la piel y por una orden del hipotálamo, en constante retroalimentación con los sensores en la piel. El propósito del sudor es que al entrar en contacto con el aire, se evapore para enfriar la piel, y que haya la temperatura ideal para continuar con la actividad física.

¡Van algunos mitos sobre el sudor, y la neta!

El sudor contiene grasa y que por ello se baja de peso. ¡Falso! El sudor es 99% agua y contiene minerales (sodio, potasio, calcio y magnesio), lactato y urea. ¡No tiene grasa ni toxinas! El cuerpo lidia con éstas de diferente manera (vía hepática y renal) y no por sudar más se baja de peso.

En el sauna se sudan toxinas ¡Falso! El sudor no tiene toxinas. Existe la creencia de que sudar baja de peso y elimina “toxinas” porque al salir de un sauna o vapor, y pesarte “pesas menos”, pero eso es por la pérdida de agua, que recuperaras –casi en su totalidad- al beber o comer algo. ¡Aguas! No permanezcas mucho tiempo en saunas, vapores o tinas calientes. Esto puede generar procesos complicados de deshidratación.

Entre más se sude, más se baja de peso. ¡Falso! Puede ser que sudes mucho y bajes, pero no es una relación directa. También puedes sudar poco –en apariencia- (entrenando en un lugar con aire acondicionado o fresco) y bajar de peso. ¡Recuerda que la clave es qué y cómo entrenas!

¿Si me envuelvo en un plástico o una faja para sudar, adelgazo más? ¡Falso! No entrenes con plásticos, sudaderas o ropa abrigadora (salvo en condiciones de bajas temperaturas). Al hacerlo así, harás que tu cuerpo expulse más agua y se deshidrate de manera excesiva. Los estados de deshidratación causan baja en el rendimiento deportivo y generan cansancio.

Cuando hago ejercicio no me da sed ¿debo tomar agua? ¡Sí! De hecho el sentir sed es una señal de un 1 ó 2% de deshidratación. Por eso, especialmente al entrenar: Toma agua ¡Aunque no tengas sed! Lleva una botellita y toma un poco cada rato. Generalmente, por cada hora de entrenamiento fitness (a intensidad moderada) debes tomar de 500ml a 1 litro por hora.

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Fitness Lifestyle Coach. Tiene un diplomado en entrenamiento para la estética corporal y otro en nutrición deportiva.

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