tragedia en el mundo

No por ignorarla la tragedia desaparece

La tragedia no ha desaparecido, no verla en los medios no significa que esté resuelta.

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Cada tanto el horror y la tragedia que se vive en buena parte del mundo alcanza notoriedad global, la mayoría de las veces no. Fue necesaria la muerte de un niño sirio en playas turcas en septiembre del año pasado para que su fotografía fuera tema central en buena parte de los medios globales. Esto hizo reaccionar a los líderes europeos y el tema de los refugiados se convirtió en la agenda a resolver.

Los refugiados africanos y sirios en Europa han generado gran debate y destapado lo más oscuro de la sociedad europea. La ultraderecha ha venido creciendo junto con su discurso nacionalista y racista.

Pero la tragedia no ha desaparecido, no verla en los medios no significa que esté resuelta. Tan solo la semana pasada más de 880 migrantes/refugiados murieron ahogados en el Mediterráneo producto del hundimiento de 3 frágiles embarcaciones que habían salido de Libia con destino a Italia.

La ruta del Mediterráneo ha cobrado la vida de más de 2,500 personas este año, en el mismo periodo del año pasado la cifra era de 1,855 según datos de la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados. Muchas de las víctimas son menores de edad.

Estas personas huyen de la brutal violencia de Siria, Irak, Afganistán y países de la África subsahariana; otros buscan mejores condiciones de vida.

Para los refugiados de Medio Oriente esta no es la ruta ideal, llegar a Libia es muy largo y complejo, el trayecto por mar es más peligroso. La utilizan debido a la resolución europea de cerrar la ruta por Turquía-Grecia-Balcanes para llegar al centro de Europa. Tan solo el año pasado, más de un millón realizaron a pie esta travesía escapando del horror para buscar refugio en Alemania. En la ruta desde Libia han sido detenidos más de 40 mil personas este año y más de 200 mil han logrado llegar a Italia.

La solución no es más controles y más cierres fronterizos. La solución se encuentra en detener la violencia en los países expulsores y mejorar las condiciones de vida. Sin embargo, los intereses económicos y políticos en el caso sirio han empantanado una posible solución a un conflicto que lleva más de 5 años y que contribuye a esta crisis con el mayor número de refugiados. No se trata solo de una guerra civil, que ya sería muy grave, sino de un conflicto donde uno de los participantes es un grupo genocida (el autodenominado Estado Islámico).

Es obligación, legal y ética proteger a las personas que se encuentran en peligro. Esta crisis solo se encuentra en la agenda de los partidos políticos que pretenden no aceptar refugiados. El mundo de hoy parece no ser receptivo a un discurso de responsabilidad internacional, lo único que interesa es el bien propio y las víctimas que se las arreglen como puedan. El horror de la Segunda Guerra Mundial que generó conciencia en occidente hoy se olvida en buena medida porque las víctimas son los otros. Creo que es momento de asumirlo, vivimos en un mundo donde las víctimas no importan. Casi siempre fue así pero el proyecto civilizatorio que nace de las cenizas de ambas guerras mundiales pretendía otra cosa. No hemos sido capaces de lograrlo.

Las brutales imágenes de los naufragios de la semana pasada no alcanzaron la notoriedad suficiente como para, al menos, generar debate. No por ignorarla la tragedia desaparece.

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1 COMENTARIO

  1. En Canadá estamos recibiendo refugiados sirios pero muy pocos, podríamos y deberíamos recibir más. No podemos, tal y como mencionas, ignorar esta tragedia.

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