5 tipos de empleados que contaminan tu negocio
Te decimos cómo son, cómo te afectan y cómo solucionar tus problemas con ellos...
El ambiente en el trabajo no es fácil y nunca lo va a ser, hay que saber manejarlo, adaptarse y conocer a cada una de las personas con las que trabajas para que las relaciones laborales fluyan y que eso se vea reflejado en los resultados.
Tipos de empleados tóxicos que contaminan tu negocio:
El terrible problema: A nadie le gusta ver a alguien que está teniendo problemas, pero las constantes llamadas de auxilio y el exceso de confianza en otras personas puede llevar rápidamente proyectos a paso de tortuga y causar frustración generalizada.
- Rasgos: conductas defensivas, desorganización, falta de credibilidad, resistencia al cambio.
- Qué hacer: ofrecer formación adicional, introducir planes de mejora, dar apoyo, fomentar detección de problemas personales.
El flojo: Su trabajo es encontrar formas de NO trabajar. Son una pérdida importante de tiempo y energía. No le importa lo que los demás piensen de él.
- Rasgos: baja motivación, mal cronometraje, absentismo.
- Qué hacer: Exigir rendición de cuentas, imponer visitas no programadas y las revisiones, reconocer y recompensar el esfuerzo.
El mártir: Insiste en hacer todo por sí mismo, pero esa carga de trabajo le causa problemas. Quiere que todos sepan lo que está sacrificando para cumplir con el trabajo.
- Rasgos: No conoce sus límites, se queja a menudo, trabaja hasta cuando está enfermo.
- Qué hacer: Enseñar a delegar, animar a tomar tiempo libre pagado, presentar medidas para el manejo de estrés, incentivar el trabajo en equipo.
El socialité: Divertido, entretenido, y el mejor amigo de todo el mundo. Trata el trabajo como una fiesta, el escenario de cada día.
- Rasgos: Ruidoso y molesto, falta de concentración, poco profesional.
- Qué hacer: Definir tiempos y actividades sociales para el personal, ser claro acerca de la conducta apropiada, canalizar la energía interpersonal.
El sociópata: Envenenan la atmósfera y crean un ambiente hostil para los demás empleados.
- Rasgos: Acosadores, indiferencia al protocolo, problemas interpersonales, manipulación y sabotaje.
- Qué hacer: Proporcionar un ambiente seguro y de apoyo, tomar en serio las quejas de los empleados, confiar en tus instintos, documentar cuiadosamente los comportamientos negativos.
Con información de: Plan A