Beneficios de caminar después de comer
Caminar después de comer no solo nos ayuda a bajar la comida, tiene otros increíbles beneficios que seguro ni conocías
Una simple caminata ligera de dos minutos terminando de comer, puede ayudar a reducir el azúcar en la sangre y el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 según la Universidad de Limerick en Irlanda. Los investigadores dijeron que incluso unos pocos minutos de caminata lenta con poca intensidad fueron suficientes para crear una caída notable en los niveles de azúcar en la sangre de los participantes del estudio.
Caminar y estar de pie puede afectar positivamente el metabolismo de la glucosa. Después de comer se libera glucosa, la cual da como resultado un pequeño aumento en los niveles de azúcar en la sangre. Si bien los pequeños picos de azúcar no son anormales, mantener los niveles de azúcar es fundamental para controlar la diabetes. Y caminar ayuda, ya que la participación activa de los músculos absorberán el exceso de glucosa en el torrente sanguíneo. Y no solo nos puede ayudar físicamente, también emocionalmente, ya que se libera serotonina, que nos ayuda a dormir mejor, tener un apetito más regulado, aumenta una mentalidad positiva y la memoria. Además de esto caminar después de comer nos puede ofrecer otros beneficios como:
- Regula el trabajo intestinal
- Optimización del sistema linfático para eliminar los desechos y movilizar la linfa/líquido
- Aumento del flujo de circulación a todas las extremidades con un intercambio de flujo de sangre fresca
- Liberación de “hormonas felices”, que incluyen dopamina, oxitocina, serotonina y endorfinas/analgésicos naturales, lo que reduce las hormonas del estrés en el cuerpo
- Aumento del metabolismo de las grasas al mantener la frecuencia cardiaca en una zona de menor intensidad, al tiempo que se minimiza la estimulación del cortisol
- Reducción del inicio de la inflamación al reducir las hormonas del estrés
Está claro que es momento de empezar a caminar un poco más ¿cierto? Si no eres muy fan de caminar, te recomendamos tratar de integrar la caminata poco a poco hasta convertirla en un hábito. Puedes hacer que la experiencia sea más agradable si escuchas un audiolibro mientras caminas, ves tu serie favorita (en la caminadora, no queremos accidentes), pones 2 o 3 canciones que disfrutas y caminas al ritmo de la música (trata de que sean movidas). ¡Así que ya sabes, después de comer es mejor salir a caminar unos minutos que ir directo al sillón por una siesta!