Lo mejor de vivir solo
Vivir solo es buenísimo para conocerte y convertirte en una mejor persona
Antes pasabas de la casa de tus papás a la de tu esposo/a y luego, luego tenían hijos. Ahora es más común vivir fuera con tus hermanos o roomies y cada vez más la gente elige vivir solo, solo. Como todo, tiene ventajas y desventajas (como pagar tu solo el internet, el cable y Netflix), pero vivir solo es buenísimo para conocerte mejor y convertirte en una mejor persona. ¡Tienes que vivirlo!
1. Te llevas mejor con tus amigos y familia. Cuando vives solo haces lo que quieres, duermes como quieres y tienes el desmadre que quieres. No necesitas alzar tu cuarto para que tu mamá no se enoje y puedes andar en calzones por toda la casa. Pero cuando ves a tus papás o hermanos lo valoras mucho más, aprovechas el poco tiempo que tienen juntos y no pelean por tonterías.
2. Conoces mejor tus capacidades y deficiencias. Es más fácil crecer como persona cuando te conoces bien. Viviendo solo te das cuenta tus miedos, carencias, de lo que es realmente importante para ti. Si eres de los distraídos que dejan abierta la ventana cuando va a llover no tienes a quien culpar y aprendes a poner atención; si eres de los que cree que puede todo pero quemaste tres camisas intentando planchar, aprendes también a pedir ayuda.
3. Aprendes a caerte bien a ti mismo. En México no estamos acostumbrados a pasar tiempo solos, para muchos es de lo más horrible tener que esperar a alguien en un lugar porque asociamos el estar solo con la soledad. El chiste es aprender a disfrutar de la soledad y descubrir lo que más te gusta hacer: cocinar, ver películas cursis, limpiar, dormir, hacer zumba en tu sala o simplemente disfrutar del silencio.
4. Manejas mejor el dinero. No hay de otra. Si se te olvida pagar la luz, vas a llegar un día a tener que prender velas. Si te fuiste de fiesta y te gastaste media quincena, no puedes pedirle a tu mamá y vas a vivir de atún dos semanas. Es más fácil aprender a ahorrar cuando no dependes de nadie.
5. Los retos no te asustan. Si ahora cambias tus focos, matas alacranes y doblas toda tu ropa solo, es más fácil que aceptes responsabilidades y retos con menos miedo. Esto te puede ayudar tanto en tu vida profesional como personal.
6. Tomas mejores decisiones. El decidirte a vivir solo es la primera decisión difícil que vas a tomar. Pero de ahí pasas a escoger el proveedor de internet, la marca de la leche, cocinar o comer fuera, tener la tele en el cuarto o en la sala. A la larga vas a tomar muchas mejores decisiones en todos los aspectos de tu vida.